La argentina Gabriela Celeste “Chucky” Alaniz volvió a demostrar su jerarquía al vencer por decisión unánime a la colombiana radicada en Suiza Laura “La Fresita” Wollenmann, en el marco de la Convención Anual de la WBO celebrada en Bogotá, Colombia.
La púgil de Merlo se quedó con la eliminatoria al título mundial mosca de la WBO, colocándose en la línea directa para enfrentar nuevamente a la actual campeona indiscutida de la división, la estadounidense Gabriela “Sweet Poison” Fundora.
Alaniz, dirigida por su entrenador y pareja Leandro Ledesma, busca ahora la revancha ante Fundora, quien le arrebató sus títulos meses atrás. La “Xeneize”, decidida y en gran forma, lució sólida durante todo el combate, mostrando mayor volumen de golpeo y controlando el ritmo ante una rival dura y combativa.
El duelo tuvo lugar en el Ágora Convention Center de Bogotá, y un día antes, en el pesaje oficial, Alaniz registró 50,650 kg, mientras que Wollenmann marcó 50,800 kg, ambas dentro del límite de la categoría mosca.
Con este triunfo, Celeste Alaniz se acerca a una nueva oportunidad mundialista, dispuesta a recuperar lo que alguna vez fue suyo, y confirmar así que su lugar está entre las grandes del boxeo femenino internacional.
Más historias
Fuerza, legado y renacer: el pulso del boxeo latino
Tomomi Takano se une a 12 Raund Sports
Mikaela Mayer reina en Canadá