La campeona mundial de peso ligero de la WBA, Stephanie Han (11-0, 3 KO), superó un inicio turbulento para imponerse por decisión unánime a la colombiana Paulina Ángel (7-2-2, 3 KO) y retener su corona con tarjetas idénticas de 98-91.
El combate, que representó la primera defensa titular de Han, comenzó con dramatismo: apenas a los 23 segundos del primer asalto, un derechazo a la mandíbula enviado por Ángel mandó a la estadounidense a la lona. Sin embargo, Han se levantó con firmeza y recuperó el control en los asaltos siguientes, mostrando temple y oficio.
En el cuarto episodio, un choque accidental de cabezas provocó un profundo corte en la ceja izquierda de la campeona. La sangre corrió por su rostro, aunque no comprometió su visión ni su desempeño.
A lo largo de la contienda, Ángel fue la peleadora más agresiva, pero la eficacia y volumen de golpes de Han marcaron la diferencia. El pleito se tornó algo trabado en el noveno asalto, con numerosos clinches producto del desgaste físico de ambas boxeadoras. Finalmente, en el décimo y último round, Ángel mostró su mejor versión desde aquel primer capítulo, pero ya era demasiado tarde para revertir las tarjetas.
Con esta victoria, Stephanie Han conserva su invicto y continúa consolidándose en la división ligera, mientras que Paulina Ángel, pese a la derrota, dejó en claro que tiene herramientas para competir en la élite.
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