En una velada histórica y completamente femenina en el Madison Square Garden de Nueva York, Katie Taylor volvió a imponerse a Amanda Serrano en su tercer enfrentamiento, esta vez por decisión mayoritaria, y retuvo sus cuatro cinturones del peso superligero. La irlandesa cerró así la trilogía con un contundente 3-0 en el registro, aunque el debate sobre la segunda pelea aún divide opiniones.
Lejos del fuego cruzado que definió sus dos duelos anteriores, este tercer capítulo fue más una partida de ajedrez que una guerra sin cuartel. El icono femenino del deporte irlandes apostó esta vez por la distancia, el control del ritmo y eludir los intercambios. Fiel a su estilo metódico, fue construyendo la ventaja conectando la mayor cantidad de golpes y las combinaciones más limpias y más efectivas.
Las tarjetas reflejaron esa paridad con matices: 97-93, 97-94 para Taylor y un 95-95 en la tercera tarjeta. Con esta victoria, la irlandesa mejora su récord a (25-1, 6 KO’s), mientras que Serrano queda en (47-4-1, 31 KO’s), una cifra impresionante que no borra el mérito de haber enfrentado a Taylor subiendo desde divisiones menores, y compitiendo de igual a igual.
Aunque este tercer combate fue el menos espectacular de la serie, la cita en el Garden fue inolvidable. Con entradas agotadas y varias de las mejores boxeadoras del mundo presentes en la cartelera, la noche dejó un mensaje claro: el boxeo femenino ya no es una promesa, es una realidad que llena estadios y cierra trilogías de alto nivel.
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