Por Félix Pozos
El boxeador mexicano y hasta hace unas semanas considerado el mejor libra por libra regresa a una cartelera de boxeo en el mes de septiembre, fecha por demás conocida en el medio boxístico como una de las más trascendentales para el pueblo mexicano.
Cuatro años tuvieron que pasar para que el Canelo regresara a un combate estelar en noche Precisamente su último rival en dicha fecha fue el kazajo Gennadiy Golovkin, enfrascándose un 15 de septiembre del 2018 en un pleito que vendría a ser el desempate #CaneloGGG2.
Aquel combate tenía en juego los títulos de la AMB, CMB, IBO, The Ring vacante y el lineal vacante en peso mediano. La decisión de los jueces fue mayoritaria a favor de Saúl Alvarez, pero como siempre, no faltan los que generan polémica y ven ganador al rival del Canelo. Al final son sólo voces y los cinturones le fueron arrebatados limpiamente a GGG.
Pero ¿Por qué tuvieron que pasar cuatro años para que el jalisciense regresara a una pelea estelar en septiembre? Hagamos memoria.
Después de Golovkin, hizo una defensa contra Fielding en el mes de diciembre del 2018, en el que salió victorioso por KO. Posterior a este enfrentamiento vino una nueva defensa en mayo del 2019, fecha que suele tener una relevancia importante para nuestros paisanos en EEUU, inclusive para el mismo gringo, que hasta lo considera como el super bowl del boxeo, pues bueno, volvió a salir airoso derrotando a Daniel Jacobs por DU.
El Canelo era representado y manejado por Golden Boy, así que, bajo esta tutela, renuncia a sus títulos de peso mediano y lo hacen subir a las 175 libras, pero, no en septiembre, sino en noviembre para retar al ruso Sergey Kovalev, a quien noquearía en el onceavo round y con ello arrebatarle el campeonato de los semicompletos de la WBO.
Para este entonces ya la armonía con Golden Boy venía en decadencia. Meses más tarde Saúl firma un contrato multimillonario con DAZN, el cual se habló de que sería un crecimiento exponencial para el mexicano, sólo que no considerarían que entrando el año del 2020 vendría la hecatombe, una pandemia genera caos y la cancelación masiva de eventos deportivos.
Empezó el toma y daca con Oscar de la Hoya, ya que para el mes de junio empezaban a aperturar ciertos eventos con capacidad limitada, a lo que Saúl quería si o si combatir, pero eso no representaba un negocio para Golden Boy ni para DAZN. Justo fue aquí cuando se hablaba de la trilogía con GGG, pero Golden Boy dijo públicamente que una pelea contra el kazajo en la que no hubiera entradas no sería negocio, así que esto fue la gota que derramó el vaso y la separación definitiva de Oscar con el Canelo.
Ya por fechas le resultó imposible al güero acomodar una contienda para el mes de septiembre, adicional que aún el aforo permitido en varias ciudades de USA no superaba el 30%, así que tuvo que esperar a diciembre del 2020 para presentarse por el título vacante supermediano del CMB contra Callum Smith.
Después vinieron peleas en febrero y mayo del 2021, así que todo apuntaba a que por fin podría regresar en septiembre, sólo que ahora se atoró el tema en el escritorio, el Sr. Caleb Plant decidió no firmar la pelea de unificación mundial, alegando que el contrato contenía “clausulas absurdas” y a 7 semanas del 15 de septiembre no se pudieron arreglar, así que todo este tema contractual lo arrojó al mes de noviembre, en donde Plant se presentó y se llevó un Knockout con valor de 10MDD.
Ahora que Canelo ha confirmado la trilogía ante Golovkin, podemos declarar que damos por terminada la dulce espera de ver al mejor boxeador mexicano de los últimos tiempos en la fecha más mexicana que puede existir.
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